25.10.10

My heroin.

La música era su droga.

Era la forma de olvidar, de alejarse de todo por un momento, de exaltar los sentimientos, de llorar cuando no le quedaban lágrimas, de gritar, de quedarse sin voz, de transmitir ideas, de levantar conciencias.
Cuando lo conoció, se convirtió en la forma de amar. Los besos y las caricias se acompasaban al ritmo de la música. Su amor era una melodía susurrada al oído, una canción sin sentido cobraba significado gracias a una noche de sexo.

Por eso, ahora, la música también significaba dolor.

1 comentario:

  1. La música siempre estará en los buenos momentos,
    pero cuando estemos mal, también nos acompañará.

    ResponderEliminar

Susúrrame tus sueños.