Días como éste me traen recuerdos...
Melancolía en la lluvia.

Coge un puto libro y madura.

Eres jodidamente preciosa, lo admito, pero estás vacía por dentro.
Completamente vacía.

Y esa belleza te abandonará algún día. 

Lo sabes... ¿verdad? 

Claro que lo sabes, por eso vives amargada. 

Por eso amargas a los demás.

Porque la belleza es lo único que hace que te sientas querida y, cuando se marche...

Estarás sola.

Justo como mereces.

Adiós, abanico, que llegó el aire...

... O de cómo se desechan sentimientos y personas.

Y la fluidez de un sentimiento se interrumpe
para dar cabida a algo nuevo,
a algo mejor, que conviene y no hiere.

El paso del tiempo duele con cada latido
y la distancia es solo una excusa.
La realidad es que la razón puso pies en polvorosa
y tú te convertiste en una zorra.

Llora el alma que ha perdido a su musa
pese a que la vida le dio suficientes hostias
para entrenar un corazón
que ya no debería sufrir por desamor

No hay quien pare la fuerza del deseo.
Excepto, tal vez, el egoísmo.

Sucesiones.

Sucede que la vida pasa y se escapa entre los dedos.
Sucede que las cosas cambian y a veces no somos capaces de aceptarlo.
Sucede que el mundo avanza, y más te vale no quedarte atrás...
Porque el mundo no espera a nadie, y menos a ti.

I was your Opheliac.

Me dijiste que yo era tu Ofelia,
y pensé que serías capaz de salvarme.

Que había encontrado a alguien capaz de rescatarme
de las aguas que me ahogan,
que me arrastran al fondo, 

haciendo que mis ropas pesen y consiguiendo que me hunda.

Pero la realidad es,
que pese a no ser capaz de mantenerme a flote por mi misma, 

ni de salir del agua por mi propio pie,
sigo siendo mas fuerte que tú.